Troscos tristes que no llegan a célebres

Hay troscos que son tristemente célebres, por poner el caso, Luis Zamora.

Zamora es un trsco de esos que se se pelean hasta consigo mismo. Rompen con su otro yo, aparatean las cenas familiares, y no pueden decidir qué colectivo tomar porque no se pone de acuerdo si son dos minutos por orador y dos oradores por fracción, en la asamblea unipersonal que define una revolucionaria acción: tomar el colectivo.

Pero nadie puede negarle que es célebre, célebre por haber llegado al Congreso de la Nación y triste por todo lo demás: desaporvechar todas las oportunidades que la izquierda tuvo de hacer algo digno, ser acusado de acomodar familiares en el congreso, pelearse con los pocos aliados políticos que le quedaban, por presentarse como candidato en un sistema que según él no era legítimo, en fin totalmente trosco... Triste.

Pero hay troscos que siendo tristes ni siquieran logran ser célebres. A continuación una pequeña muestra:

Los militantes del PO de la facultad de Ciencias Sociales, Filosofía y Letras, CBC en todas sus sedes. En síntesis, los militantes del PO.

La gordita del MST que canta arriba del colectivo del MST en las marchas, consignas tan modernas como "Ole, ole, ole, ola, a los asesinos la cárcel ya, a los compañeros la libertad"

Gustavo Lerer, quien lideraba el conflicto en el Hospital Garraham allá por Agosto del 2005. Ese que creía que el hospital era un Soviet, cuna de la revolución. Y que ahora ve el Soviet subterráneo, porque no sé como fue a parar al conflicto de los subtes, después de pasar por el conflicto docente, el conflicto de las papeleras, el conflicto de los empleados de Taxi, el conflicto de las torres en construcción en caballito, y demás conflictos sociales, que parecen ser como un imán para estos troscos.

Aunque en la foto que se muestra a continuación, tiene un perfil claramente leninista, de frente es inegablemente trotskista, esepero nunca verlo de espaldas, porque me voy a decepcionar si al final resulta como todos: Peronista.